1.6.11

Norelys Morales, Blogueira cubana, participa de encontro em Porto Alegre

Norelys Morales, blogueira cubana e fundadora da "Red Blogueros y Corresponsales de la Revolución", que possui 1325 membros em 30 países, participou do Encontro de Blogueiros e Tuiteiros do Rio Grande do Sul, promovido pelo #BlogProgRS realizado na Câmara Municipal de PortoAlegre.

Em sua apresentação, Norelys falou das experiências acumuladas pelos blogueiros cubanos e insistiu na importância da manutenção de uma conduta responsável na rede.

Acompanhe Norelys em: @norelysmorales e islamiacu.blogspot.com

El Che Guevara, ejemplo de vida para las nuevas generaciones

 Publicado por webguerrillero
Prólogo de a la versión argentina de En la selva (Los estudios desconocidos del Che Guevara. A propósito de sus Cuadernos de lectura de Bolivia)
Néstor Kohan
PROLOGO

Este libro que ahora está en tus manos condensa un trabajo de muchos años de investigación, estudio y militancia.

Nuestro primer acercamiento al pensamiento del Che Guevara se produjo en los últimos años de la escuela secundaria, todavía bajo la dictadura militar argentina. Un compañero nos regaló unas fotocopias totalmente gastadas y descoloridas de su hermana mayor que para nosotros significaron la joya más preciada. Se trataba del libro de Michael Löwy El pensamiento del Che Guevara.

Por esos años habíamos leído y estudiado aproximadamente unas 50 veces, o quizás más, el mensaje del Che a la juventud (que los compañeros cubanos publicaron con el título “¿Qué debe ser un joven comunista?”). En esa secundaria, la primera cartelera del Centro de Estudiantes que hicimos, siempre bajo dictadura militar, la inauguramos con una cartulina blanca con la cara del Che y su entrañable “Carta a mis hijos” reproducida con marcadores y fibras escolares. Nuestra primera revista escolar se llamó La trinchera. Su primera portada llevaba el rostro del Che y una estrella roja de cinco puntas, también pintada artesanalmente con marcadores (una por una). En medio de la movida de esa revista cortamos la calle y tomamos la escuela, a amigos nuestros los expulsaron, nosotros terminamos presos en la comisaría.

El Che nos acompañó desde nuestra primera militancia adolescente, cuando un sector importante de la izquierda institucional argentina —la que quedó viva luego del genocidio del general Videla— lo veía como “un extremista”, “un romántico idealista”, “un aventurero” o simplemente como “un foquista”.

Muchos años después fuimos a Cuba. Conocimos compañeros suyos que habían combatido junto a él en Sierra Maestra, en el Congo, en Bolivia. Los entrevistamos. También conversamos y grabamos a los principales especialistas en su obra. Nos trajimos un cargamento de libros y materiales. Seguimos profundizando.

Nuestro primer escrito teórico sobre el pensamiento del Che fue publicado en 1989, en medio de la debacle ideológica de la Unión Soviética (URSS) y del sandinismo (Nicaragua), mientras militábamos en la villa miseria «Carlos Gardel» (ubicada en la provincia de Buenos Aires), durante los nefastos tiempos de Raúl Alfonsín (cuyos intelectuales se reían de Guevara y lo caracterizaban como “el otro demonio” equiparable al terrorismo de estado). Allí, en ese primer ensayo, titulado “Marxismo y humanismo”, confrontábamos al Che Guevara y su lectura de El Capital con Louis Althusser (y elípticamente, con Marta Harnecker, su principal discípula latinoamericana, de gran influencia en Argentina y en todo el continente).

Luego, en 1992, en pleno auge del neoliberalismo a escala mundial, nos fuimos a Bolivia. Allí, junto a guevaristas bolivianos publicamos nuestro segundo texto teórico sobre el Che (bosquejo del artículo “El Che Guevara y la filosofía de la praxis”, aquí incorporado).

Hasta que en 1997, ayudados por el Centro Che Guevara de La Habana, inauguramos la primera Cátedra Che Guevara en la Universidad de Buenos Aires (UBA), como parte de un colectivo  de trabajo bastante heterogéneo. Las Cátedras Che Guevara proliferaron por todo el país. Recorrimos innumerables ciudades argentinas con ese mensaje. El Che era —para nosotros— el mejor antídoto contra el neoliberalismo de Carlos Saúl Menem, uno de los personajes más bizarros y miserables de nuestra historia política.

Desde aquel lejano 1997 hasta hoy pasó mucho tiempo. Las modas van cambiando. La “onda del momento” es muy errática. Algunos compañeros abandonaron el barco, ya no se sentían afines. Giraron entusiastas hacia el posmodernismo de Toni Negri. Otros y otras se desplazaron subrepticiamente hacia el multiculturalismo y el autonomismo. Las opciones “a la moda” fueron de lo más variadas.

Nosotros continuamos batallando con la Cátedra Che Guevara y la formación política de la militancia de base. En la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo, en el Hotel Bauen (recuperado), en la fábrica textil Brukman (recuperada), en la Escuela piquetera de formación política 22 de agosto «Héroes de Trelew» que funcionó en una fábrica textil de Florencio Varela (barrio periférico de la provincia de Buenos Aires), en la villa miseria «1-11-14» del Bajo Flores (villa ubicada en plena capital federal), en la Universidad de Buenos Aires, ahora en la Universidad de los Trabajadores inaugurada en la fábrica metalúrgica IMPA (recuperada) o donde sea. También inauguramos Cátedras Che Guevara en Chile y Bolivia y la Escuela de cuadros «Manuel Marulanda» en Venezuela, además de participar en la Escuela Nacional Florestan Fernandes (ENFF) del Movimiento Sin Tierra de Brasil.

Con viento a favor, con viento en contra. Siempre remando y haciendo trabajo de hormiga en la misma dirección, teniendo como faro y horizonte al Che Guevara, a Mariátegui y a Bolívar. Con el pesimismo de la razón, pero con el irrenunciable optimismo de la voluntad.

todos los análisis y estudios incorporados a En la selva constituyen el producto de esa historia personal que al mismo tiempo es una historia política colectiva. Su fuente de inspiración puede resumirse en dos actividades paralelas.

Por un lado, años y años de investigación (el material inédito del Che Guevara en Bolivia nos lo entregó generosamente Tristán Bauer hace como diez años... bastante tiempo para invertir en un libro, no es una investigación redactada de apuro en un fin de semana). Nos tomamos en serio la tarea de indagar, profundizar y estudiar al Che. No nos satisface repetir tres consignas superficiales. Guevara se merece un estudio en serio.

Por otro lado, años y años de militancia voluntaria (jamás cobramos un solo peso) en la Cátedra Che Guevara y en todos los espacios de formación antes mencionados.

Militancia, investigación y estudio. Ese es el “secreto” de este libro. Así lo hicimos. Como actualmente (fines de mayo de 2011) continuamos impulsando la Cátedra Che Guevara lo utilizaremos para continuar la batalla de las ideas y la formación de la militancia de base con el objetivo de formar cuadros revolucionarios. Nuevos jóvenes se acercan hoy al Che. Ojalá sean sus continuadores. Como decía Lenin, no hay nada más divertido… que luchar por la revolución.

Aunque de gestación y escritura argentina, En la selva salió publicado por primera vez en Venezuela, gracias al apoyo de los compañeros bolivarianos de Misión Conciencia, la Escuelita “Un grano de maíz” y el periódico Debate socialista. La primera presentación de todas se hizo junto a los obreros y obreras del petróleo, organizados en la agrupación sindical Vanguardia Obrera Socialista (VOS) y en los núcleos sindicales de trabajo voluntario de la costa oriental del lago de Maracaibo.

El libro se distribuyó gratuitamente, principalmente entre los trabajadores y en la juventud. Y además se publicó en Internet, tanto en la página web de nuestra Cátedra Che Guevara-Colectivo Amauta como en varias otras páginas amigas de comunicación alternativa (Rebelión, La Haine, La Rosa Blindada, Kaos en la red, Revolución o muerte, etc).

En el momento en que redactamos este prólogo a la edición argentina, el libro En la selva ha sido ya traducido al gallego-portugués y está siendo publicado —nos referimos a ediciones en papel, no solo digitales— en Galiza y Portugal por las organizaciones Primera Línea (comunista independentista de Galiza) y Política Operaria (de Portugal). En estos momentos se está evaluando una edición por parte de compañeros brasileños a partir de esa misma traducción al portugués.

También está siendo traducido al idioma euskera y publicado por los revolucionarios abertzales que luchan por la independencia y el socialismo de Euskal Herria (el país vasco). En León (dentro del estado español) militantes del sindicato ferroviario han propuesto editar el libro  con dinero de sus salarios para la formación de su militancia sindical y de la juventud.

Asimismo, En la selva está siendo publicado en estos momentos en Venezuela y Colombia por la nueva editorial vinculada al Movimiento Continental Bolivariano (MCB), Gente del sur-Insur-gente, acompañado por un extenso prólogo (en realidad un estudio preliminar) del comandante Jesús Santrich, integrante del estado mayor central de las FARC-EP (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo). Asimismo está siendo publicado en Chile por iniciativa del FPMR (Frente Patriótico Manuel Rodríguez) y en Uruguay por parte del Movimiento 26 de marzo (M-26).

Agradecemos de corazón a todos estos compañeros de América Latina y del mundo que se han sentido representados por lo que este libro intenta compartir, tanto por lo que el Che Guevara escribió y reflexionó en sus últimos días de combate como por los estudios que acompañan esos textos.

Evidentemente el guevarismo no es algo “nostálgico”, un producto mercantil pasado de moda y sepultado en los años ’60 o un inofensivo ícono posmoderno. Que las principales fuerzas sociales y políticas insurgentes, e incluso político militares, que en pleno siglo XXI siguen luchando por un mundo mejor, se hayan apropiado de este libro y lo publiquen como material propio de sus organizaciones nos llena de orgullo y de honor (ojalá alguien lo traduzca y pueda acercárselo también a los compañeros y hermanos palestinos).

Ninguna de esas ediciones busca dinero ni pretenden convertir al Che en una mercancía de shopping. Esas organizaciones hermanas, insurgentes, bolivarianas y guevaristas, publican En la selva para que sirva en la lucha contra el sistema capitalista mundial. Eso está más que claro, ¿no es cierto?
               
Si esas son algunas de las principales ediciones que se están gestando y publicando en diversos países del mundo, al menos hasta ahora (fines de mayo de 2011), dos palabras específicas para esta edición argentina.


Aquí, en Argentina, el libro sale publicado en conjunto por dos sellos editoriales: «Amauta insurgente» y «Hombre Nuevo».

El primero, «Amauta insurgente», corresponde a nuestra Cátedra Che Guevara y a nuestro Colectivo. A lo largo de todos estos años de militancia y trabajo de formación política hemos publicado muchísimos materiales —incluyendo algunas joyas de difícil acceso que hemos rescatado del olvido— pero como nunca tenemos dinero, ya que siempre realizamos nuestra tarea con trabajo voluntario, editamos nuestros materiales en formato digital por Internet.

Los difundimos en www.amauta.lahaine.org También publicamos numerosos cuadernillos en papel, pero en formato artesanal. Este es el primer libro que editamos.

La otra editorial, «Hombre Nuevo», que en su momento conocimos gracias a nuestro común amigo Orlando Borrego (amigo y colaborador de Ernesto Guevara, e invitado a nuestra cátedra en varias oportunidades), tiene su propia historia. Luego de años, nos reencontramos con estos compañeros gracias a los amigos de la fábrica recuperada IMPA, donde funciona la Universidad de los Trabajadores y nuestra cátedra.

Además de constituir la continuidad de la publicación de los libros guevaristas de Orlando Borrego El camino del fuego y Recuerdos en ráfaga por ellos editados (y presentados en nuestra Cátedra Che Guevara), accedimos a publicar en común junto con los compañeros de la editorial «Hombre Nuevo» porque consideramos que la revolución en Argentina tendrá que contar necesariamente con la convergencia de diversos afluentes.

Nosotros le dedicamos expresamente En la selva a Mario Roberto Santucho y a la corriente guevarista que Robi representó (el Partido Revolucionario de los Trabajadores-Ejército Revolucionario del Pueblo) y con la cual nos sentimos ideológica y políticamente identificados.

Pero al mismo tiempo le dedicamos esta obra a nuestros 30.000 compañeros desaparecidos, donde indudablemente también están —entre muchos otros y otras— los compañeros y compañeras de Montoneros. Nosotros reivindicamos sinceramente, sin oportunismo alguno, a todos los compañeros caídos y desaparecidos, no sólo de Montoneros sino de todo el arco del peronismo revolucionario en su conjunto, incluyendo también a las FAR, a las FAP, al Peronismo de Base, a ARP y a la resistencia al golpe gorila de 1955. ¡Todos son nuestros compañeros!

Sin ninguna duda Rodolfo Walsh, Carlos Olmedo, Marcos Osatinsky, Rodolfo Puiggrós, Rodolfo Ortega Peña, Alicia Eguren y John William Cooke también son nuestros compañeros y nuestros guías, aunque sintamos mayor afinidad política e ideológica por la corriente guevarista de Robi Santucho, Raymundo Gleyzer, Haroldo Conti, Silvio Frondizi, entre otros.

El Che Guevara no tiene dueño ni es propiedad privada de nadie. Por eso lo editamos en conjunto dos editoriales con orientaciones diversas. Cada uno lo interpela desde su propia historia y su propia identidad. En la selva constituye nuestra manera de interpelarlo y traerlo a nuestro presente. Nada más que eso.

Como demuestran otras insurgencias, la revolución socialista argentina, necesariamente deberá recuperar todas las rebeldías del pasado, incluyendo también —dicho sea de paso— las anarquistas de la Patagonia rebelde de inicios del siglo XX y toda la gente que peleó y murió para cambiar este país que tanto se resiste a cambiar pero que alguna vez lograremos, por fin, dar vuelta en forma completa y reordenar de raíz.

Ojalá este modesto libro sirva fundamentalmente para la gente joven, para comenzar a formar nuevos militantes revolucionarios del campo popular que, siguiendo el ejemplo insurgente del Che, estén dispuestos a poner en riesgo su vida no por dinero ni por un puestito político o alguna otra mezquindad mediocre, sino por un proyecto colectivo mediante el cual logremos la felicidad de nuestro pueblo, la Patria Grande latinoamericana, la revolución socialista y nuestra segunda y definitiva independencia.

En el aniversario del cordobazo,
Boedo, 29 de mayo de 2011

Néstor Kohan
Editorial «Amauta Insurgente» 

31.5.11

A antielitização latino-americana

As elites latino-americanas enfrentam uma crise de identidade e estão vendo encurralada sua capacidade ideológica para transfigurar seus interesses privados em projetos políticos majoritários próprios ou afins. Essas elites perderam seus pontos de referência. Elas sempre se refugiaram e se legitimaram em seus vínculos com os países centrais e na promessa de trazer o exterior para o continente como modelo para a modernização do arcaico e do periférico. Mas olhar “para fora” hoje em dia não é motivo de muito entusiasmo. O artigo é de Amílcar Salas Oroño.
1. Boa parte das forças políticas opositoras latino-americanas evidenciam hoje uma crise de identidade. Encontram-se em um pântano de ideias, uma frustração frente a certas propostas políticas impulsionadas por alguns governos da região. Trata-se de uma situação que não é simplesmente de superfície: no fundo, ocorre que as elites latino-americanas estão vendo encurralada sua capacidade ideológica para transfigurar seus interesses privados em projetos políticos majoritários próprios ou afins. Neste sentido, um processo de antielitização latino-americana parece também estar constituindo a cena contemporânea.

2. O dilema para estas forças opositoras é que elas incorporaram quase como único e relevante princípio de ação aquilo que é indispensável para as elites: reeditar uma possível “harmonia” dos interesses sociais, tornarem-se os garantidores de uma sociedade sem conflitos na qual primem os mecanismos “naturais” de resolução de demandas, junto com as posições de privilégio. Frente às “desmedidas” dos governos, a importância prática do “equilíbrio”. Pode-se dizer que elites e forças opositoras se mimetizam, ou melhor, se complementam: os setores opositores funcionam como descarga discursiva das elites, com o apoio dos meios massivos de comunicação. Mas essa mesma pretensão do “fim dos conflitos” apresenta hoje em dia sérios problemas para relançar-se teoricamente em alguns países.

3. Não é no nível concreto da geração de riqueza ou em fatores de poder que as elites perderam terreno, mas sim em uma dimensão que também resulta fundamental para a dialética social: os imaginários coletivos. As elites não estão conseguindo atravessar e organizar discursivamente há algum tempo os diferentes níveis de linguagem das sociedades. Como dado eloquente, cabe destacar que as manchetes do Clarín e do La Nación, na Argentina, do ABC, no Paraguai, ou do Estadão e da Folha de São Paulo, no Brasil, já não geram a mesma comoção na opinião pública. Neste sentido, a capacidade das elites para promover uma extensão de seus (auto) princípios de legitimação – com seus valores, modelos de relações sociais e metas coletivas – está fortemente afetada; é como se uma brecha tivesse sido aberta entre suas interpretações e os imaginários coletivos.

Esta circunstância se deve, fundamentalmente, ao fato de que as elites periféricas perderam seus pontos de referência. Elas sempre se refugiaram e se legitimaram em seus vínculos com os países centrais e na promessa de trazer o exterior para o continente como modelo para a modernização do arcaico e do periférico. Mas olhar “para fora” hoje em dia não é motivo de muito entusiasmo: crises especulativas com prejuízos na casa dos bilhões, deslocamento forçado de contingentes de imigrantes, perseguições religiosas, modelos de sociedade baseados na redução salarial e no ataque a direitos adquiridos, ou então o avanço de valores como os que impulsionam o Tea Party, nos EUA, ou os partidos de direita na Suécia e na Hungria.

4. Esta desorientação habilita, por sua vez, o giro “antielitista”: arraigam-se outros princípios ordenadores nos imaginários latino-americanos. Há novos sentidos comuns e outras dinâmicas – e outras maneiras de descrevê-las – vinculados com as agendas públicas de certos países: se no Brasil, talvez pela primeira vez em sua história, percebe-se coletivamente a possibilidade de uma mobilidade social para os setores subalternos, isso se deve ao impacto de determinadas políticas, como a reversão da primazia do trabalho informal sobre o formal ou os milhões de novos estudantes que tiveram acesso à universidade; na Venezuela, o declarado “anti-imperialismo” cultural e institucional construiu, como mostram alguns estudos, outros tipos de interação e modelos de relações sociais, inclusive domésticas, a respeito do que implica uma sociedade do consumo; o mesmo poderia se dizer sobre o “bem viver” no Equador ou Bolívia, capítulos constitucionais que, burocraticamente, colocam reparos práticos às tentações neoextrativistas e, ao mesmo tempo, reasseguram sua particularidade política histórica: a inclusão de identidade indígena em seus projetos; ou na Argentina, onde a “democratização” de certos aspectos cotidianos, como o matrimônio igualitário ou a pluralidade da informação, reconfigura o caráter do significado do progresso pessoal.

5. Estas fórmulas, que lutam espiritualmente com outras não tão auspiciosas e também creditáveis aos governos em questão, atravessam os imaginários sociais e se incorporam aos universos simbólicos da cidadania, orientam e organizam a absorção das interpretações circulantes: de alguma maneira, constituem-se nas barreiras ideológicas que encontram as elites para impor suas ideias. Não se trata, como diz Beatriz Sarlo, de uma simples “batalha cultural”; deve reconhecer-se como um avanço político o fato de que os modelos societários das elites estejam sem possibilidades de movimento e capilaridade. 

Isso não anula a debilidade e a falta de organicidade com as quais se dão as mudanças, ou que apareçam fricções no interior das coalizões governamentais: ocorre no Equador com a Aliança País e os movimentos sociais, com Dilma Rousseff e a bancada parlamentar do PMDB, ou entre o governo e a CGT na Argentina. Mas essas fricções não são em torno de outros mapas conceituais, como gostariam os meios de comunicação conservadores e as elites, mas sim no interior de um mesmo quadro de ideias – assumidos com maior ou menor honestidade pelos atores – precisamente aquele que, posto em movimento, gera uma antielitização das linguagens de baixo para cima.

6. Os imaginários sociais não são realidades secundárias: ali também se colocam questões chave para o futuro. Está claro que não há condições objetivas para uma radical “mudança de época” na América Latina. No entanto, há certas condições subjetivas, no plano dos imaginários, que parecem ter dado um salto otimista, e que são consequência da interação com certas políticas públicas; daí a crise de identidade e de perspectiva de certas elites e forças opositoras. A região apresenta uma diferença em relação a outras latitudes: ao invés de levantar muros entre comunidades, talvez seja o momento para assumir em sua verdadeira dimensão conceitual aquilo que está comprometido socialmente com a originalidade latino-americana; como insistia José Carlos Mariátegui: nem imitação, nem cópia...criação heroica.
(*) Professor do Instituto de Estudos da América Latina e Caribe, da Universidade de Buenos Aires.

30.5.11

Presentador de cadena RT arrestado en Washington por protestar a favor de libertad de expresión



El presentador del programa político ‘Adam VS The Man’ de la cadena RT, Adam Kokesh, fue violentamente atacado en EE. UU. por la policía, que lo detuvo mientras participaba en un ‘flash-mob’ en el monumento a Thomas Jefferson en Washington.
Kokesh fue detenido junto con otros activistas unos segundos después de haberse puesto a bailar en silencio en el lugar. Según comentan, su acción estaba destinada a defender la Primera Enmienda a la Constitución de los EE. UU., que garantiza la libertad de palabra y la libertad de reunión.
La policía agredió a algunos de ellos. Varias personas fueron esposadas y tiradas al suelo. Los participantes del ‘flash-mob’ calificaron estas actividades de violación del derecho a libertad de expresión, precisamente aquello que estaban defendiendo. Ahora los detenidos se someterán a un juicio.
Adam Kokesh es veterano de la guerra de Iraq, activista político y ex candidato al Congreso de EE. UU. Grabó el vídeo de su detención.
Desde julio 2010, Kokesh presenta el programa ‘Adam VS The Man’ que sale al aire desde los estudios de 1550 KIVA en Albuquerque, Nuevo México.  En abril de 2011 su show fue recomado por la red rusa de televisión RT . Accuracy in Media  lo criticó  por trabajar con RT que es financiado por el gobierno ruso, afirmando RT lo “utiliza para hacer propaganda”.

HOMENAGEM AOS CINCO HERÓIS DE CUBA